Este 2019, cumple 25 años de haber visto la luz la obra maestra “Grace”, único disco del incomparable cantautor estadounidense Jeff Buckley. Uno de los mejores cantantes de la historia. Si no conoces a este músico, al escuchar este disco recordarás el nombre de Jeff Buckley por siempre.
La obra poética de Buckley
Considerado desde su salida al mercado como una obra maestra, tanto por críticos como por el público en general, “Grace” es un disco muy auténtico, original y trascendental que ha marcado a generaciones de músicos. Ha sido elogiado por infinidad de artistas como Robert Plant, Bob Dylan, Paul McCartney, Chris Cornell y Jimmy Page.
“Las canciones simplemente salen de poemas, y a veces los poemas provienen de sueños, o de la realidad” dijo Buckley en una entrevista.
“Grace”, álbum debut de Jeff Buckley, fue el único que logró completar durante su vida. Es un poemario; cada canción, un poema. Cada pieza maneja una estética singular, extraordinaria, te atrapa y te hace sentir vivo, hace que todo valga la pena.
Con canciones atípicas, pero espléndidas, “Grace” es un trabajo memorable. Un legado para las generaciones que han venido y vendrán después de Buckley. En él muestra su habilidad para la composición, su talento natural como cantante y guitarrista, así como la capacidad de transmitir emociones con solo el tono de su voz.
“Fui capturado por la música a una edad muy temprana. Realmente fui capturado por todo lo relacionado con ella. Era mi madre, mi padre, era mi juego, mi juguete, era lo mejor de mi vida.”
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Algunos aspectos que motivaron su fama se encuentran fuera de las pistas de estudio. Tales como su capacidad interpretativa, su facilidad para fluir entre registros, la flexibilidad vocal, su convicción con la música y a la hora de tocar. Sus presentaciones siempre apasionadas, en conjunto con una personalidad atrayente, que conquistaba los corazones y mentes de la audiencia, recibiendo y compartiendo mensajes. No necesitaba más que su voz, incluso en ocasiones sin guitarra, para embelesar a la audiencia.
La banda que acompañó a Buckley en la grabación del álbum estuvo compuesta por Matt Johnson (batería), Mick Grondahl (bajo) y Michael Tighe (guitarra). Se formó unas semanas antes de iniciar la grabación, pues Buckley había trabajado como solista por un tiempo, pero al ser firmado por Sony, tuvo que reclutar una banda. Gracias a la convergencia y química entre los músicos, Jeff los invitó a grabar, realizando el proceso unas semanas después de conocerse.
“Grace” es un álbum que roza por instantes la perfección. Expresa pureza, sinceridad, un fascinante color y textura de voz. Es una muestra de su talento descomunal, de su lírica, su melancólica forma de cantar. Con composiciones originales asombrosas, con covers de los que se adueña, convirtiéndolos en propios, e incluso en ocasiones como “Hallelujah” mejorando la versión original. Ese disco, en conjunto con las grabaciones de sus presentaciones en vivo, lo posicionaron como uno de los mejores músicos de todos los tiempos. Es ahora una leyenda.
https://www.youtube.com/watch?v=vmQqaNv7S2s&t=933s
Grace, la gracia de Jeff Buckley
El álbum abre con la canción Mojo Pin, que hipnotiza desde las primeras notas. Desde ese instante, se percibe como un disco fuera de lo común. Escrita por Jeff Buckley y Gary Lucas. Jeff dijo que la canción era sobre el sueño de una mujer negra. A través de un lavado de imágenes extrañas, las letras transmiten una sensación de adicción.
Grace, en la que también contribuye Gary Lucas, es la canción que le da título al álbum. En esta pieza, Buckley demuestra su capacidad lírica y calidad vocal, el rango de su voz y el increíble manejo de la misma. En esta canción se logra apreciar la increíble sinergia de la banda. La temática de la canción es no temer a lo que sucederá con la propia vida y dar el salto.
Last goodbye, compuesta únicamente por Jeff Buckley, es una de las canciones que más éxito comercial tuvo. Maneja un riff de guitarra que fluye a lo largo de toda la canción. Posee una estructura más común de una canción. La letra habla del fin de un amor.
Lilac wine, canción de James Shelton, demuestra la habilidad y el gusto musical que Buckley tenía para escoger canciones únicas que conmovieran desde el primer acorde y la primera frase. Con la sutileza de su voz y el arreglo, además de una fuerte dosis de dulzura, se vuelve un tema magistral.
So real, tema enigmático escrito por Buckley y Michael Tighe, fue generada a partir del riff de guitarra. Fue una de las últimas composiciones en realizarse y agregarse al disco. Jeff dijo sentirse satisfecho y tener a salvo el disco al terminar esta canción. Logra mantener un suspenso que en ocasiones explota para llevarte a uno de los coros más identificables del disco.
Hallelujah, canción original de Leonard Cohen, es un tema cautivador y considerado por muchas personas como la versión original. Jeff superó con creces la interpretación de Cohen. Es considerada un clásico, y una de las mejores canciones de Buckley. En una entrevista mencionó que la escogió por la canción en sí y no por su admiración por Leonard.
Lover, You Should’ve Come Over, una de las mejores entregas musicales del disco y de Jeff Buckley. Escrita completamente por él, logra tatuar al escucha. Con algunos de los mejores versos en la historia como «Toda mi sangre por la dulzura de su risa», y «Ella es la lágrima que colgará dentro de mi alma para siempre».
Corpus Christi Carol, composición de Benjamin Britten y pieza cumbre en el disco, es impecable. Se puede apreciar a plenitud su hermosa y poderosa voz, su sensibilidad interpretativa, el don especial que tenía.
Eternal life, original de Buckley, muestra un lado más agresivo, un rock pesado en combinación con su maravillosa voz. Se aparta de las expectativas de un disco en general sutil, abriendo una ventana a la variedad de sonidos e influencias con las que podía jugar.
Dream brother, compuesta por Buckley, Mick Grondahl y Matt Johnson, tiene influencias orientales marcadas. Utiliza una serie de matices que te hacen transitar en una especie de visión onírica.
https://www.youtube.com/watch?v=XjO4IenAyUw
“Mis principales influencias musicales: amor, ira, depresión, alegría, y sueños, y Zeppelin, totalmente.”
Sus influencias iban desde el jazz, folk, blues, rock, Led Zeppelin, Bob Dylan, Joni Mitchell, Leonard Cohen, Édith Piaf, The Smiths, Miles Davis, Duke Ellington, Nina Simone, Muddy Waters, John Lee Hooker, MC5.
Este álbum atemporal, exige atención. Es una exploración de los sentidos, de la hermosura del mundo, de su tristeza, del amor, de las vicisitudes de la vida, del odio, del enojo, de la alegría, el gozo, de la amargura, la pérdida. Es un paseo en tren por todos los estados de ánimo de una persona.
Disfrutar “Grace”, es una experiencia mística única. Es entrar en la mente de un genio, traspasar las barreras del tiempo. Cada canción fue planificada magnifica y minuciosamente. Presenta un detalle excepcional, letras muy trabajadas, coherencia narrativa y un exquisito uso del lenguaje.
Jeff Buckley, eternamente
Escuchar “Grace” es como presenciar una lluvia de estrellas, es inefable sentir las pinceladas de su voz y poder conocer su mundo. Cada interpretación de Jeff es una perla en el océano y Buckley es un cometa que desapareció en el cielo.
Su arte, lleno de un lenguaje poético, se desvaneció después del impactante álbum debut. La esperanza de ver la prometedora carrera de Jeff Buckley se vio frustrada tras la prematura muerte del artista. Ya había comenzado la grabación del segundo disco cuando falleció en circunstancias extrañas. Postumamente, se publicaron los esbozos de lo que sería su segundo disco: «Sketches for My Sweetheart the Drunk».
Su aparición en la escena musical fue un momento prodigioso en la historia, no solo de la música, sino de la cultura del mundo. Desafortunadamente, falleció en 1997 a la edad de 30 años, dejando un vacío y una ingente huella en la música.
“La música es interminable, me he enamorado innumerables veces de todo tipo de música, todavía tiene algo, supongo que es simplemente, libertad.” Jeff Buckley.