Danza oriental básico: Aprendiendo a sentirme femenina

Originalmente las mujeres danzaban para sí con y para otras. El harem o harim, estancia privada y familiar en las residencias musulmanas donde las mujeres de la casa “eran ellas mismas”, danzaban acompañadas de las palmas, sonidos vocales o alguna cinta ya deteriorada de tanto escuchar. En tiempo de parto acompañaban a la parturienta con sus movimientos pélvicos para inducirla al trabajo de pelvis para el parto. Las mujeres egipcias desde la época prefaraónica danzaban ritualmente llamando a la fertilidad.

La sensualidad estaba presente en la ritualidad, en el baile para preparación de parto y en las tardes de verbenas. Las mujeres sentían su sensualidad para sí mismas, autoconociendo sus movimientos sutiles, ondulaciones, brazos de serpiente, su fuego en los golpes pélvicos y shimmys, así como su carisma en la expresión facial.

El taller que impartiremos busca reencontrar estas prácticas para tu autoconocimiento, que conozcas la forma propia de tu sutileza, de tu fuego interior, de tu carisma facial.

Costo: $200

Se requiere de previa inscripción.